jueves, 24 de enero de 2008

Si tu umbral vivira

Un dia nublado, y las esperanzas siguen inmobiles en espera a ser descubiertas, el sitio sigue quieto, en total calma como motivando a que siga pensado el siguiente paso en la escalera, Un dia cegado cualquiera, sin luz de caricias, sin movimiento, con las ideas tan claras pero tan complejas para un lapiz y un papel, y de seguir asi, un blog quedara otro dia mas vacio.



Todo es tan relativo, y tan ambiguo que nada tiene sentido en esta conversacion, ayer fue un dia soleado, y talvez la luz de inspiracion regreso al camino, y los clicks en la pc dieron lagrimas y tristezas, fue un dia sellado en un eterno pacto donde un mensaje en el ordenador alimento mi alma.



No entiendo porque las letras hoy son mas dificiles que las de ayer, todo lo tengo aqui en mi cabeza tan claro que no puedo trasmitirlo, como quisiera tener un poco de tu facilidad para llevar lo intangible en eternas realidades. Como me gustaria que fueras hoy mis amores, tu mis limites, mis enigmas, mis complicidades, como me gustaria que tu fueras las letras dentro de tu foto en las calles de Santiago, que el umbral el dia de hoy me hablara, que describieras mis lluvias de inspiraciones, tu mis escrituras eternas, lo mas adecuado para mi locura, asi como tambien para tu locura, que describieras las mil formas de querer la noche donde estoy despierto mirando mis fieles lunas, solo tu podrias demostrar que el cielo hoy y siempre estara online.

Las existencias siempre tienen sentidos de vida y de muerte, que bonito seria tener control absoluto de tu vida y las situaciones propias, esto seria tanto como tener mas que el control, seria tanto como ser tu propio Dios y creer solo en ti. Yo jamas confundo la casualidad con el destino, y creo fielmente que mi existencia no se basa en los exitos sino en cada fracaso que me hace dudar de si un dia llegare a mi final, es tan confuso pensar que vives por llegar a un final que jamas veras, pero que asi lo asumes y eso me hace tener la tranquilidad que solo no creer que eres Dios te da, y que hace que los demas te vean como alguien en quien puedan tener la confianza que necesitan de mi. Yo si creo que las eternas satisfacciones son parte de las eternas noches de errores y de inmadureces. Asi que porque dejar de ser inmaduro si eso te hace mejor?? Porque cuando llegas al limite de seguir fallando llega el tiempo de disfrutar de lo que aprendiste con cada tropiezo.

Talvez es tiempo de saber que destino nos toco vivir no crees?

:)

sábado, 12 de enero de 2008

Recuerdos de Ciorán

Claramente, la llegada del nuevo año no es para mi ni tan especial, ni tan atractiva.
Es más una época de nostalgia, en la que añoro volver a ser niña, cuando nada nada importaba demasiado, cuando me acostaba con los pies acalambrados de tanto haber jugado, cuando veía a mi familia de una forma muy distinta a como los veo ahora.

Es parte del crecer, desilusionarse y ver como tus superhéroes de antaño se convierten en simples personas. Con más defectos que virtudes, lejos de lo que un día pensé.
Ver a mi familia envejecer, cada uno con nuevos problemas, la llegada de nuevos individuos, la pérdida de la unidad.

Porque aunque hoy, como antes, aún seguimos reuniéndonos, me queda la triste impresión que es porque mis abuelos están demasiado viejos y sigue siendo ese el compromiso.
Pero lejos de estar juntos por quererlo así.

Mi mirada, que se vuelve cada día más crítica, empaña esos momentos.
Y hago un esfuerzo por volver a entusiasmarme, por interesarme, porque se que un día añoraré también los momentos que hoy vivo más por cumplir que por otra cosa.
Y leo tu relato y lo agradezoc. Por recordar que la vida pasa volando y que lo que hoy tengo me puede ser despojado en cualquier minuto.

Pero ya estoy en Santiago, en una de esas noches infinitas de trabajo y escritura.
Y pienso en todo eso, y me vuelvo a proponer el reencanto.

Y también creo que mi sentir va más allá de mi familia y de haberme convertido en una mujer demasiado exigente.
Quizás he perdido la capacidad de impresionarme, demasiado realista, demasiado especuladora.
Y eso en todo orden de cosas.
Se me vivne a la mente un escrito de Cioran que alguna vez fue mi consigna:

(..) De los hombres, solo me interesan aquellos cuya existencia conforma una serie de encrucijadas, solamente los hombres que tienen destino, cuya vida se dilata tanto, que ya no pueden dominarla de modo alguno.

Que nuestra presencia sea una repimenda, un miedo, una congoja, un extasis o una alegria.

Que nadie sepa cuanto tiempo vamos a vivir, lo que vamos a hacer, como vamos a pensar, sino que solo el miedo y la alegria por nuestras caidas y elevaciones hagan de nuestra existencia una sorpresa continua, una zozobra extraña.

Ser para otro motivo de alarma, de presentimientos, de meditación, de odios y de entusiasmos, que nadie este seguro del camino por el que vamos ni del que emprenderemos.

Que nuestra existencia sea un problema tan irresoluble que nisiquiera la muerte pueda resolverlo nunca, sino que nuestra ausencia física aumente el tormento de lo ininteligible.

Todos los hombres que no tienen un destino, pisan con paso firme la existencia, tienen la seguridad que ellos han de llegar a alguna parte, porque el final está implicado en la premisas de su ser.

Sin embargo, ese hombre es para si mismo una intranquilidad absoluta y una ocasión de intranquilidad para otros.

En él, el temblor de la individuacion es una alucinación, un extasis, un ensueño o una explosión, una creación infinita, una nada que se vuelve ser.

Y entonces se formula a ese hombre la última pregunta: si el mundo fue creado o si todavía no ha sido. (...)



¿Qué crees tú?

Lejos, lejos me siento de aquellos días... en que mis ideales eran puros e intrransables, en que cada día era una nueva aventura por vivir.

Un abrazo,
Mo